¿No usas tu nombre real en Internet? El anonimato online: lo que la vida offline esconde

«…But at any rate they could plug in your wire whenever they wanted to…» George Orwell. 1984.

¿Sabías que el Gobierno podría exigir el DNI para acceder a las redes sociales?

¿Por qué Google+ exige el uso de nombres reales?

¿Usas un pseudónimo en Facebook? ¡Pues lo mismo te levantas un día y tu cuenta ha desparecido!

El anonimato debe ser un derecho fundamental en la red. Si, si, como lo oyes. No refunfuñes. Este tema acumula polvo y se ha ladrado tanto sobre él que si te pica la curiosidad tendrás lectura para todo un mes o más. Con poner: «Anonimato internet» en Google…

Enrique Dans, en una de sus mil entradas magistrales en su blog nos deja esta perla, la cual comparto 100%. «Entender que el uso de un pseudónimo o el uso del anonimato es una manera de “esconderse” para llevar a cabo comportamientos con connotaciones negativas (trolling, insultos, etc.) es una manera injusta de juzgar a muchos por el comportamiento de unos pocos.»

Hay mucho forofo del refranero popular: «Piensa mal y acertarás». Me da a mí que el que pronunció esta frase por primera vez era un paranoide (el que desconfía sistemáticamente de todos, el que ve en los otros a un posible enemigo, el que interpreta las acciones de los demás como deliberadamente hostiles hacia él) ¡Vaya infierno estar todo el día desconfiando! No te fies, no te fies…dicen las mamás y las abuelas.

En Facebook hay nombres de los más variopintos. Un día vas a etiquetar a un amigo y te cuelves loco para buscarlo y claro, es que ahora se llama «megustaelguacamole ole» ¡Toma ya! Nose si es peor el remedio que la enfermedad…

¿Anonimato para qué? ¿Tienes algo que esconder? Pues hay quien si lo tiene y hay quien no. En muchos casos, se utiliza el anonimato para denunciar situaciones o expresar opiniones que a cara descubierta muchos no pronunciarían por temor a las represalias. Sin anonimato, muchos países que se encuentran bajo un régimen opresor no podrían chillar en la red como lo hacen. Entonces, ¿usar la máscara del anonimato es bueno o malo? Uff, qué dificil. Depende, según como se mire TODO depende.

El Gobierno ha pensado que el DNI electrónico (ese que la mitad de la población no sabe muy bien para que sirve) podría ser la solución. Internet se ha convertido en coladero, en una burla sin fronteras. Si un crio de 12 años intenta comprar una revista porno en un kiosko parece obvio que no lo conseguirá; pero esa difcultad se difumina en el mundo de la tecla. Aporrea el teclado, indica que es mayor de edad y punto pelota. Pues, parece que lo de legislar y controlar tiene sentido…

¿Ser anónimo para descargarse de todo? ¿Vives con miedo a que la SGAE interrumpa una cena en tu casa? 

Y es que si un anónimo publica:

A: «El Real Madrid ganó 2-0» No hay ningún problema porque es un dato que fácilmente podemos comprobar.

Ahora, si lo que publica es:

A: «El Real Madrid debe su victoria a un sustancioso sobre de dinero que se le entregó al arbitro minutos antes del partido» En ese caso, hay que comprobar fuentes y asegurarse. Y es cuando se usa eso de «No acepto tus argumentos porque no estás usando tu nombre verdadero».

¿Se va a convertir internet en un Big Brother (hablo de Orwell)? ¿O lo es ya?

STOP. PENSEMOS.

Los actores, artistas y demás seres del mundo de la farándula, siempre han usado motes, pseudónimos y apodos. Bien, ¿Madonna, Pink o Lady Gaga no pueden usar Google+ con «sus nombres artísticos»?Ah.. igual ellos si. ¿Y los demás? Yo como Guzmanizer no puedo moverme en la red, o sí… ¡Vaya lio!

Lograr el anonimato total en Internet es casi casi imposible, vamos dejando miguitas de pan en forma de IP,s, e-mails, etc.

Os invito a reflexionar sobre este tema y os dejo un par de lecturas.  Estoy absorta, párpados hieráticos. Como reza el blog: hambrienta y leyendo sin parar.

El triste resultado de ponerle puertas al campo

Anonymity